Me marche de mi tierra el viernes 12 del presente mes con 8 baños en mí haber de este año, hoy vuelvo con 23.
Han sido unos días intensos de surfing, he conseguido alcanzar más de la mitad de los baños que me he marcado como objetivo para este año (43, uno más que en 2018). Pero estos días han dado para mucho más.
Como el año pasado, mi pequeño surfer se unió al Peque Surf (campamento de surf perfectamente organizado por la Federación Cántabra de Surf). El resultado ha sido más que satisfactorio. Ha estado muy contento durante toda la semana, y ha salido con ganas de más. Muchísimas gracias a la Federación y en especial a Pedro Gutierrez, el motor de todo esto que se deja el alma para que todo esto funcione. GRACIAS PEDRO!!!
La verdad es que durante la semana las condiciones han sido mínimas, pero hemos aprovechado cada punto bueno de marea para rascar baño. El mejor día, sin duda, fue el miércoles. Parece que la profecía de que los Miércoles son Grandes se cumplió, y las condiciones mejoraron. Incluso, tuve regalos en forma de fotos. Primero por la mañana Foto Surf Somo tuvo a bien cazarme con su carcasa en el agua:
El estilo inconfundible se ve aunque sea de lejos.
Y por la tarde, Landscapes in motion nos cazó en el mejor baño, en mi opinión, de las vacaciones:
Mi hermano se marcó este girazo en la primera ola de la tarde:
Y hemos rematado la semana con un baño, del que esperaba poco, que ha sido muy divertido. Mi Karma fin Tom Blake, ha funcionado a la perfección. Todavía me queda mucho para dominarla, pero cada prueba resulta más divertida que la anterior.
Ha sido una gran semana, en mi Loredo´r particular.
Paz gente.