Me encanta Surfer Magazine.
El primer ejemplar que compré, tendría 15 años y todavía poco surf, salvo un bodyboard machacado, había echo. Encima mi nivel de inglés todavía no incluía palabras muy técnicas de surf pero entre sus espectaculares fotos y la ilusión que me hacía comprar esa revista, en 700 pesetas al cambio que me costó, me hacía sentir grande.
Ahora las nuevas tecnologias mandan y tiene una impresionante versión digital en la que hoy destaco su sección de shape.
LARGA VIDA A SURFER MAGAZINE!!!!